"...El hecho de necesitar un contexto particular para el aprendizaje, de requerir ciertas ayudas especiales, el hecho de poder aprender con ciertos instrumentos y no con otros, a partir de cierta propuesta didáctica y no otra...todo ello no configura por sí mismo un problema en el aprendizaje. Podemos ir más lejos: el hecho de no poder acceder a ciertos contenidos no configura por sí solo una dificultad en el aprendizaje así como tampoco el hecho de acceder a la lectura o a la escritura o a las operaciones aritméticas en otros tiempos que los que marcan los ciclos escolares actuales. El tratamiento psicopedagógico no se ocupa de compensar déficit intelectuales ni déficit en el aprendizaje sino de permitirle al sujeto, sea cual fuere el déficit que la enfermedad introduzca, la apropiación de los objetos de conocimiento que en cada momento de su historia como alumno sea capaz de construir. Se ocupa de que ese niño pueda ubicarse en una posición desde la que sea capaz de construir con su déficit y a pesar de él. Por eso el tratamiento psicopedagógico se ocupa de las letras y los números pero también del particular lugar que esos números y esas letras tienen para esa familia, para esa escuela, para ese docente. El tratamiento psicopedagógico no se ocupa del déficit pero sí del lugar que el déficit tiene en los padres, en los compañeros de la escuela, en su maestro..."

de "Psicopedagogía: conceptos y problemas" Norma Filidoro

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