La medida posibilitaría el acceso de los sectores más pobres a materias extracurriculares, como idioma y arte 

Desde hace dos años, según lo establece una ley, el 30% de los alumnos de primaria y secundaria de todo el país debería estar concurriendo a escuelas de Jornada Escolar Extendida (JEE). Sin embargo, los que lo hacen son menos del 5%. Así lo revela una investigación del Centro de Estudios de la Educación Argentina (CEA), de la Universidad de Belgrano.

Paradójicamente, la norma que dispuso en 2005 la universalización de la doble jornada y exige que se priorice, en su aplicación, a los sectores más pobres, es la misma que se cumplió sobradamente en el aspecto de la inversión. Se trata de la ley de financiamiento educativo -26.075-, que fijó el 6% del Producto Bruto Interno como piso de los gastos destinados a la educación. 

Según el informe del CEA, dirigido por el economista Alieto Guadagni, la cantidad de alumnos inscriptos en escuelas primarias con jornada completa en todo el país sólo aumentó 2,46 % entre 2005 y 2010, muy por debajo de lo esperado. Además, mientras en 13 provincias, aunque, levemente, aumentó la cantidad de chicos en esa modalidad, en 11 jurisdicciones se redujo.

En cambio, el comportamiento en el sector privado fue diverso. La matrícula en las escuelas de gestión privada con jornada extendida aumentó, entre 2005 y 2010, el 42,76%.

Los autores del informe de la Universidad de Belgrano destacan lo sucedido en la provincia de Santa Cruz en relación con esta medida. Indican que, en 2010, en esa provincia sólo nueve alumnos, de un total de 29.014, tenían una jornada escolar extendida. "Esto es un retroceso notorio ya que en 2005 había en esta provincia 140 alumnos en JEE", dice el informe. Y agrega que tal retroceso "llama la atención" porque Santa Cruz "es una provincia con una alta coparticipación de impuestos por habitante (más del doble de lo que reciben Tucumán, Salta y Misiones) y con una significativa regalía anual petrolera de alrededor de 40.000 pesos por alumno primario (la más alta del país)".

También consideran "crítica" la situación en el conurbano bonaerense, donde menos del 2% de los 626.000 alumnos del nivel primario asiste a escuelas de jornada extendida.

Expertos en educación coinciden en que la jornada completa es una oportunidad para reorganizar las actividades y los contenidos propuestos por las distintas disciplinas. Reorganización que daría lugar a materias que hoy no están en la mayoría de las escuelas, como nuevas tecnologías, diferentes expresiones artísticas, deportivas y culturales.

El pedagogo Juan Carlos Tedesco, ministro de Educación de la Nación durante la gestión de Néstor Kirchner entre 2007 y 2009, afirmó que "el no cumplimiento de la meta de la jornada extendida no es por falta de voluntad política sino que hay dificultades reales para cumplir con esa meta especialmente por la estructura del financiamiento educativo argentino que descarga sobre las provincias todo el financiamiento docente".

"El costo de la jornada extendida en términos de infraestructura relativamente se puede resolver -opinó- pero la dificultad más seria es quién paga el costo adicional que tiene en términos de personal docente."

La especialista en Educación y ex ministra de esa área en la provincia de Buenos Aires, Silvina Gvirtz, consideró que la jornada completa podría permitir que cada docente pueda estar seis horas frente a los alumnos, en el aula, y destinar otras dos horas cada por día para corregir, participar de alguna reunión, recibir a padres u desarrollar otras actividades de este tipo. "que son parte central de la tarea docente". Gvirtz juzga importante ofrecer a los docentes una propuesta clara y realista en cuanto a los días de reuniones, por ejemplo.

"Sería razonable esperar que aquellas provincias que gozan de los más altos niveles de coparticipación federal de impuestos por habitante registren los mayores niveles de cumplimiento de las metas de jornada escolar extendida en el nivel primario, ya que tienen mayores recursos financieros para implementar una política educativa socialmente inclusiva. Sin embargo, no es así", dice el trabajo dirigido por Guadagni.

Las tres jurisdicciones que, según la investigación del CEA, encabezan la lista de las diez que superaron el promedio nacional del 5,73% de la matrícula, en el nivel primario, de escuelas estatales con jornadas extendidas, son la ciudad de Buenos Aires (con el 44,85%); Catamarca (15,79%), y La Pampa (14,43%). Las tres que, por el contrario, encabezan las catorce que menos cumplieron con la meta de la ley, son Santa Cruz (0,03%), Tierra del Fuego (0,29%) y Corrientes (0,54%). 

www lanacion.com.ar  05/09/12

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